EL JEFE MASSAI EN KENYA y sus ojos
Kenya cerca del Masai Mara. Estamos en una aldea massai que hemos venido a visitar a escondidas pagando algunos dólares al chófer y al guía desde nuestro albergue (lodge). El poblado es un gran espacio en forma de círculo construido con ramajes secos marrones, tiene una única puerta. Una fuerte olor a estiércol de cabra y millones de moscas nos reciben junto a los cánticos de las mujeres massai que habitan dentro del poblado. Los niños pululan aquí y allá sonriendo te dan la mano, meten la suya en tus bolsillos..
Las mujeres muestran sus casas que son chozas construidas junto a la cerca, invitando a ver la comida, las camas.... El cemento o yeso está suplantado en las paredes y el techo por el estiércol seco de las cabras y vacas del rebaño comunal. Las mujeres echan unas sábanas sobre el suelo y muestran abalorios de cuentas de colores y otros objetos de artesanía manual para venderlos. No soporto la cantidad de moscas y un poco asqueado salgo del recinto cercado.
El JEFE massai está allí de pie, 1.95 mts. serio, callado, con un fajo de dólares en la mano. El guía habla alguna palabra con él de vez en cuando mostrando mucha sumisión hacia él. El guía es de la tribu Kikuyu y adora el estilo de vida nómada y libre de los Massai. Un guerrero de la tribu con un palo de madera en la mano me increpa amenazante, muy amenazante, como para ser respondido, pero no sé qué hacer. Busco la mirada del Jefe y sus ojos que miran uno a Massachussets y otro a Connecticut me increpan por el hecho de estar fuera y no comprando como el resto de turistas forasteros inútiles.
COMETAS EN JAIPUR
Jaipur es conocida por la Ciudad Rosada. Años atrás un maharajá un poco afeminado ordenó construir todos los edificios de un ladrillo rosado especial, el resto de edificios que fueran pintados en tonos de ese color. Y es un sueño estar en medio de tanto rosa. Frente a mí el famoso Palacio de los vientos.. La calle está muy transitada por bicicletas, ricshaws (artilugio en el que un hombre transporta viajeros a pedal), pero pocos vehículos de motor. !Socio acabo de comprar un reloj de pared en 7 euros, te imaginas! - me dice un turista español (te imaginas tú cómo lo vas a mater en la maleta, listo).
Los cientos de pequeños tenderetes sobre la acera de madera parecen vender más que cosas inservibles, nada atrayentes, pero se comercia. India es un país magnífico para sentir el lento transcurrir del tiempo. Aquí parece dormido. Nosotros somos los extraterrestres que portamos armas de fotografiar, intentando conquistar y civilizar lo incivilizable.
El sol se pone. El cielo adquiere un tono rojizo y camino hasta el final de la calle principal entre la que cruzan monos langures, perros, vacas, bueyes de agua, mujeres con pañuelo con jarros en la cabeza y bebés en la espalda...y muchos niños. Decenas de cometas rosas se alzan intentando tapar el sol que se diluye en el cielo de fuego rosado, cercado por edificios rosados..
VPB
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